Caminata

Empecé a paso lento, tal vez con la intención equivocada, ver el mundo dar vueltas. La forma más lógica de hacerlo es lograr un viaje hacia arriba, y aunque soy de esos trabajadores honestos, no pude estar entre los 7 que hicieron turismo espacial. La manera más fácil me dije, es pisar la Tierra con atención, de todas maneras es un planeta redondo y si me apuro lo suficiente puedo lograr ver como da vueltas, ser como esos osos de circo que existían cuando el abuso animal no estaba prohibido.

oso

Durante mi travesía me dejo distraer fácilmente pero una vez que pasa la primera marejada de pensamientos me enfoco y empiezo a correr, es raro el mundo en el que vivimos, no puedo ir en una sola dirección. Encuentro por todas partes postes, muros, autos, gente estancada y el mundo sigue girando pero como yo, la mayoría no puede verlo.

Necesito un despoblado, el despoblado por otra parte no me necesita, me amenaza, no encuentro alimentos, el refugio es peligroso y solo me otorga un alivio temporal, empiezo a desesperar, veo unas flores venenosas. Quizás las pruebe…

Y entonces el mundo dio vueltas.

Sincronía

La vida es una cosa tan curiosa e intrigante.

Solo pensar que tus palabras se transformanen una cosa fría y muerta. Bits que viajan a la velocidad de la luz para luego volver a tomar una forma cálida y honesta e impactar en una manera inesperada…

El cuerpo se estremece, las máquinas inconscientes dentro de mis células empiezan a descargar sustancias, se abren y cierran puertas/canales, mis neuronas comparten electricidad…

El impulso se transforma, algo se mueve, otra se derrama, todo se reorganiza y el agua, el sodio, el cloro y otros pedazos de cosmos empiezan a formar algo tan real y tangible como la lágrima que va cayendo mientras cuelgas.

El teléfono y mi voz se apagan en una sincronía menos mágica.

Entrevista en la radio

Llegué algo cansado, siempre ando así… mis horarios puede que no sean tan cargados como los de otro pero son tan desorganizados que termino teniendo un día de 36 horas y me veo obligado a dormir doce horas y a soñar las otras 24. Saludo cordialmente a la productora del programa, le pregunto si revisó el material, me dice que no tuvo tiempo, que solo alcanzó a ver el video más corto, que hubiera sido bueno que tuviera subtítulos (sí los tenía). Me excuso por ella, me estoy acostumbrando.

Nos sentamos, anuncia mi nombre y lee el cuarto de hoja de vida que tuve que improvisar para parecer alguien interesante frente a su micrófono en una entrevista pregrabada, porque ella sí tiene vacaciones.

Respiro profundo y tomo una nueva actitud porque si sigo como voy…

– ¡Buenos Días Michelle! Buenos días con todos, para mí es un placer estar aquí en [introducir nombre del programa] compartiendo con tu audiencia este mensaje que tanta falta nos hace el día de hoy, un mundo donde…

procedo a explicar que guerra, pobreza, la mayoría de problemas actuales de salud son totalmente prevenibles desde una perspectiva científica, describo el alcance de la tecnología en los tiempos actuales, la posibilidad de vivir sin combustibles fósiles, de liberar al ser humano del trabajo repetitivo y eliminar el 95% del crimen.

– Mira Andrés que interesante pero el mundo no es tan malo.

Y la entrevista se volvió cíclica.

Fin.

Tierra Seca

La tierra aquí es bastante seca, no lo suficiente para no tener que trabajarla, dividirla en surcos, pasear al ganado, sacar la maleza, cargar el arado. No bastante para no tener un sombrero desgastado, masticar una paja de trigo,  beber agua ardiente a escondidas, usar camisa roja, para mil y un frases cortas más.

Hacía sol, la lengua estaba entre seca y sucia… Uno ya estaba acostumbrado a andar con la cabeza gacha, con el peso encima, arrastrando soledades y aventuras. Es inevitable estar lontano, pensar, vagar… yo, digo uno lo hace o por gusto, o por obligación,  inercia, siempre igual con la izquierda y la derecha, a veces medio lastimado, teniendo que pensar en caminar, que pesar.