Cómo sobrevivir sin Facebook

Casi tres semanas desde que ya no tengo una cuenta en Facebook. Mi explicación de por qué eliminé mi cuenta fue quizá uno de los artículos más leídos de los 118 que existen actualmente en este blog. Algunas personas me escribieron un poco impactadas por el artículo y algunas otras decidieron dejar la red un poco después, tras descubrir que ahí dentro eran ratas de laboratorio para experimentación de psicología de masas. Facebook estableció que puede influir en el estado de ánimo de sus usuarios y en sus preferencias de voto, de lo poco que sabemos. Cabe mencionar que antes de esto he abandonado:

  • Foursquare: Cuando un amigo me envió una imagen de Quito con mis lugares más frecuentados. Me alertó sobre las posibilidades de rastreo y más grave aún, de hurto a la que nos exponemos en estas circunstancias.
  • LinkedIn: Por exigirme conferirle el «derecho no exclusivo, irrevocable, a nivel mundial, perpetuo e ilimitado para publicar, distribuir, eliminar, comercializar y, en general, explotar sin ningún tipo de límite y sin notificación alguna cualquier contenido e información» que comparta.

Y últimamente me anda preocupando:

  • Google: Por utilizar la legislación europea que permite el «derecho al olvido» y excluir de los resultados de los motores de búsqueda sitios web que a su criterio son irrelevantes, en Internet ahora todos tenemos un canal y lo esencial es a quién se lee, cuando Google no te muestra en los resultados ¿no está censurando?

Pero bueno, otro día a hablar de derechos digitales y libertad de expresión. Hoy a lo que vinimos.

Mis fuentes de información

Para muchas personas, Facebook es el medio de contacto más importante que tienen con el mundo. Desde su red social cercana (familia y amigos ‘de verdad’) hasta su portal de noticias. En mi caso, he dejado el contacto familiar para la vida real, escribo más a las personas a través de mensajería instantánea o simplemente las llamó. Nada grave, quizá lo peor que a uno le puede pasar es tener que recordar los cumpleaños de las personas que te importan. En cuanto a las fuentes de noticias, utilizo cinco mecanismos básicos para mantenerme enterado:

  1. Tumblr: Es una mezcla entre facebook (mayor diversidad en formatos de publicación) y twitter (exposición cronológica y cuentas para «seguir»). Uso tumblr sobretodo para disfrutar de arte visual y gifs animados graciosos.
  2. WordPress: Además de ofrecerte la oportunidad de crear tu blog, wordpress también genera un lector de aquellos a los que has decidido seguir. Es tan diverso como tus gustos.
  3. Twitter: Quizás más conocida que los dos recursos previos. Está ahí para compartir de todo. En mi caso, también me sirve para recordar qué leer después (marco como favoritos estos enlaces, si no estaban ahí primero los comparto).
  4. Suscripciones: Muchas páginas web te permiten suscribirte a su contenido por medio de tu correo electrónico.
  5. RSS: El efecto es similar a las suscripciones pero no tengo que dejar mi correo electrónico, sino que mi lector se «conecta» con las páginas web que ofrecen este servicio. Una de las principales ventajas es que, a diferencia de la suscripción de correo, el contenido se actualiza conforme el autor realice cambios en el artículo. Yo gestiono mi correo-e con mozilla thunderbird por cuestiones de seguridad, y para mi buena suerte éste viene con un lector de RSS, Otras personas prefieren feedly.

 Compartir mi información

La otra parte importante de Facebook es que te permite compartir información, o bueno ese era el caso hasta que decidieron cambiar el algoritmo y básicamente se ha vuelto mucho más difícil. Si realmente te interesa difundir información mi respuesta es sencilla. No uses facebook para eso, te volverás enteramente dependiente y no podrás generar el impacto de antes sin pagar. Cualquier puede abrir un blog gratuito y por cerca de $18/año hacer de ese blog una página web (es decir con su propio dominio: www.elnombrequesea.com). Puedes activar la opción de suscripción y poner a disposición de otros el RSS. Si gustas puedes ir preguntando a las personas si les gustaría recibir tus entradas y solicitarles una por una que se suscriban, o compartir tus escritos con quien crees que le puede interesar. Envíales un correo. No hay magia detrás de ello, procura usar CCO/BCC para no revelar sus correos a terceras personas.

Hay otras opciones un poco más agresivas. Puedes abrir una cuenta en Google+ y añadir a las personas a tus círculos, si los agregas de cincuenta en cincuenta estarás en la capacidad de seleccionar «Enviar un correo a mis círculos» cuando compartas algo que realmente pienses que es importante. Otro método es hacer una lista de todos los contactos que te vayas encontrando añadiendo una nota al final donde expliques como desuscribirte de tu lista (este es un requerimiento legal). Concéntrate en producir contenido de calidad, eso ayudará a que otras personas quieran compartir lo que generas.

También está twitter, tumblr y muchas otras redes sociales donde puedes seguir compartiendo tu contenido.

Mantenerse conectado

Facebook compró Whatsapp, Microsoft mató al MSN messenger y compró Skype. No hay muchas alternativas populares y esto es particularmente importante porque quieres seguir hablando con otras personas. Usar esto no está mal pero hay que ser conscientes. Cuando usas cualquier de estos medios estás enviando cartas sin sobres, la información se puede interceptar fácilmente y no tiene ninguna protección. Yo prefiero usar otro protocolo llamado XMPP y protegerlo con OTR.

Personalmente volví a usar Skype, escribo más por Whatsapp y Telegram, aunque Facebook me da la sensación de estar conectado, rara vez hablaba con alguno de mis 3000 contactos.

Mantenerse ocupado

Me comía las uñas durante los primeros días. Esa terrible ansiedad de no tener que hacer… Espera ¡Al fin tenía tiempo libre! Ahora puedo leer los enlaces que me interesan con mucha más calma y detalle e incluso he podido retomar algunos libros que tengo en mi lista de lectura. Y mucho más importante, estoy empezando a disfrutar nuevamente el no hacer absolutamente nada. El respirar profundamente. El estar desconectado. Ser feliz tiene mucho que ver con la vida contemplativa y créeme, si tienes Facebook, te la estás perdiendo.

Actualización del 24 de julio de 2014

Borré mi tumblr, ya no lo usaba. He leído mucho últimamente (^^,)